Chiringay es un restaurante con 30 años de historia a sus espaldas, posicionado en el mercado gracias a muchos años de trabajo y experiencia. Es, además, el
sitio gay por excelencia del mundo. Música, comida, sol, arena y el mar Mediterráneo...
Chiringay está dirigido por un equipo de profesionales humano y admirable que, temporada tras temporada, han convertido este lugar en un restaurante especial caracterizado por una
ubicación privilegiada en un entorno natural envidiable envuelto por la calma y la tranquilidad de Ibiza.
Disfruta de su exquisita
cocina mediterránea con el mejor ambiente desde la mejor playa. Degusta las mejores
carnes, pescados, mariscos, arroces, etc. y acompáñalo con deliciosos
cócteles,
zumos naturales, o con algún
vino o a cava de la selecta bodega.
El servicio extra bueno, cordial y eficiente. Algo realmente excepcional. Todos sus clientes coinciden en resaltar el trato impecable y alegre de todos los trabajadores, empezando por el dueño.
La cocina es sencilla pero muy buena, fresca y variada. La ensalada Chiringuito con mango salmón, palta y surtido de verdes es muy buena, el pulpo a la gallega estupendo y el pescado del día fresco y bien preparado. La hamburguesa vegetariana hay que probarla, magnífica, y el pollo thai recomendable. En cuanto a los vinos, un buen Palomo cojo será una gran elección.
La exquisita comida junto a las muy buenas instalaciones, hacen de este lugar un pequeño paraíso gastronómico.
La comida, tanto la presentación como el gusto superan a todo chiringuito de la isla. Es un nivel superior. Los precios algo elevados pero justos, teniendo en cuenta la excelencia del lugar.
Mucho más que un simple chiringuito. Uno de los lugares más recomendables de Ibiza.